Su
esfuerzo, perseverancia y dedicación le permitieron hoy a la atleta Gladys Tejeda subir
a lo más alto del podio de los Juegos Panamericanos de Toronto tras ganar la
medalla de oro de la maratón de 42 kilómetros.
Pero
no todo fue un camino de rosas para la hoy exitosa atletaGladys Tejeda, pues desde muy pequeña
tuvo que trabajar muy duro para disfrutar de sus triunfos y dejar el nombre del
Perú en alto. Ella nació en Huancayo y es la última de nueve hermanos.
En
un corto realizado por Procter y Gamble en el 2012, previo a su participación
en los Juegos Olímpicos de Londres, Gladys Tejedacontó la historia de su
vida.
“Había
momentos en que yo salía a correr. Siempre me gustaba salir a eso de las 5:30
hasta las 6:30 y mi madre siempre me esperaba lista con la comida”, contaba Gladys Tejeda.
NO
TENÍA ZAPATILLAS
En
el corto, Gladys Tejeda también contó una triste anécdota de la difícil situación que
tuvo que vivir cuando perdió una competencia, porque no tenía zapatillas.
“Recuerdo una vez que no
pude ganar porque no tenía zapatillas. Llegué segunda y esa competencia sí era
para ganar porque el primer puesto era una cocina bien grande”, relató la
atleta con nostalgia.
Gladys
Tejeda también sostuvo que al fallecer su papá no
tuvo ganas de correr más y que siempre miraba los Juegos Olímpicos y le impactó
ver que Perú no tenía muchos deportistas representando al país.
Gladys
Tejeda agradeció a su madre que siempre estuvo a
su lado y dándole ánimos para salir adelante.
“Hay que avanzar, hay
que terminar, hay que hacer, hay que aprovechar”, decía doña Marcelina
Pucuhuaranga
No hay comentarios:
Publicar un comentario