Alicia
Cóndor Cortos, dueña de restaurantes, inmuebles, cumple un mes desaparecida y
su paradero aún es incierto, pues la familia teme lo peor.
Un
equipo de Detectives de la Divincri capturó a uno de los presuntos autores
del secuestro y desaparición de la mujer barranquina, a quien pretendía despojarla
de sus ahorros que guardaba en una entidad bancaria, en Huaral.
Los
agentes que investigan el sonado caso de Alicia Cóndor Cortos -52- tras las
pesquisas realizadas en los últimos lugares donde fue vista la mujer,
permitieron recoger valiosa información que conllevó a la identificación de las
dos personas que acompañaron a la mujer a una entidad para retirar la suma de
S/. 200 mil nuevos soles.
“Tras
el retrato hablado de testigos oculares que vieron a la mujer y sus dos
acompañantes, nos permitió identificar a los presuntos raptores –extorsionadores.
Luego de un minucioso trabajo de inteligencia ubicamos al presunto
extorsionador” dijo un agente a cargo del caso.
La
intervención del presunto autor Anthony Vásquez Girio se registró en
inmediaciones de la plaza de armas de Barranca, luego que personal policial
obtuviera la orden de captura de este sujeto.
“El
acusado niega los cargos que se le imputan, pero los testigos lo señalan como
la persona que estuvo en la agencia bancaria” contó nuestra fuente.
Los
sabuesos del Departamento de Secuestros de la Divincri Huaral, están tras los
pasos de los demás integrantes de esta banda de extorsionadores que operarían en
todo el norte chico.
Como
se recuerda, fue secuestrada en horas de la madrugada de su propia vivienda en
Barranca y trasladada a Huaral en donde fue vista por última vez acompañado de
dos personas que pretendían retirar S/. 200 mil nuevos soles, de una de las
cuentas de la mujer de Caja Ica.
El
nerviosismo de los acompañantes alertó a los empleados, por lo que se la
llevaron, olvidando el DNI de la dueña de la cuenta, para posteriormente ser
recogida por una abogada Rocío Granados, quien fue detenida y luego absuelta de
los cargos que se le imputaban.
Si no aparece, cualquier cosa puede suceder y la familia de la agraviada podría tomar la justicia con sus propia manos, sobre todo contra la abogada involucrada, quien a decir verdad, pese que no se le ha encontrado indicios razonables de implicancias con el hecho, no dejaría suspicacias de estar relacionada con el atentado.
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