Le prometió amor puro e incondicional y vivir
el resto de sus vidas juntos, pero en un abrir y cerrar de ojos a su
amada se le nubló la mente y en lugar de corresponderle, de una sola
puñalada le habría quitado la vida a Fernando Ramírez, aunque aduce un suicidio.
Fernando Ramírez Ugalde -55-
hace 20 años conoció a Rosa Espinoza en el mercado en donde ambos eran comerciantes
mayoristas de frutas. Fue este negocio que los juntó, iniciándose una amistad,
que fue acrecentándose hasta convertirse
en un idilio. Sin embargo, esta historia de amor terminó en una desgracia que
conmocionó a toda la provincia.
El miércoles 27 de agosto
del 2014, como todos los días, Fernando, acompañado de Rosa, llegó a su vivienda
luego de sus actividades cotidianas; tuvieron una discusión en el umbral de su casa
porque la mujer le increpaba una supuesta inconducta y a un probable triángulo
amoroso.
“Estaba obsesionada y no quería
perder a la “gallina de los huevos de oro,” refirió un familiar cercano quien
supo de las discusiones y peleas que ella provocaba; Fernando, harto de las
constantes peleas decidió en varias ocasiones separarse de dicha mujer.
Los sabuesos del Departamento de Investigación Criminal de
Huacho, en sus pesquisas habrían develado el misterio de la violenta muerte del
mayorista de frutas, a tal punto que establecieron que el hecho no habría sido
“suicidio” sino un homicidio por las
formas y circunstancias en que habrían ocurrido los hechos.
Detallan la policía de
homicidios, que la mujer habría entrado en serias contradicciones de cómo
ocurrieron los hechos aquella noche fatal del pasado 27 de agosto del 2014.
“De acuerdo al protocolo de necropsia N° 0072
refieren que la herida punzo cortante torácica de 3.5 cm por 0.5 cm por 8.0 cm
de profundidad fue hecha por mano ajena. Es decir la muerte de Fernando Ramírez
fue hecho en forma violenta, ocasionada por mano ajena” indica el informe.
Litoral Noticias fue en
busca de Rosa Espinoza en su centro de trabajo, que se negó a prestar
declaraciones en torno a este sonado caso que la involucra como sospechosa.
“No voy a declarar, mis abogados
están viendo el tema”, atinó a decir a nuestro redactor quien intentó recoger
la versión de la mujer sobre el hecho de sangre acontecido el año pasado.
Las pruebas de
criminalística forenses y la necropsia practicada a la víctima son compatibles
con un homicidio, hecho que tendrá que ser debatido en la próxima audiencia
programada para fines de mes, en donde la fiscalía estaría solicitando la
prisión preventiva para la acusada, basándose en las pruebas incriminatorias.