Para evitar la inclusión de firmas incorrectas de adherentes en el
proceso de constitución de partidos políticos, la Oficina Nacional de Procesos
Electorales (ONPE) ha diseñado una solución tecnológica para la recolección y
validación de identidad de adherentes a través del uso de la huella digital
(registro biométrico) de cada ciudadano.
El prototipo del módulo de registro biométrico recoge tres datos: el
DNI, la huella digital y la firma del ciudadano.
La adherencia de un ciudadano a una organización política comienza con
la lectura inteligente de su Documento Nacional de Identidad (DNI), prosigue
con la captura digital de su firma mediante una tablet (que forma parte del
módulo), y finaliza con la captura de su huella digital mediante un lector
análogo al que se utiliza en las agencias bancarias.
El equipo contrasta esta huella con la consignada en el propio documento
de identidad, procediendo a validar la identidad y registrar la adherencia en
caso ambos datos coincidan. En caso contrario, la rechaza. Este proceso
se realiza en contados segundos.
El jefe del organismo electoral, Adolfo Castillo Meza, dijo que el uso
del registro biométrico – contemplado en su Plan de Trabajo- simplificará
y acelerará la depuración de las listas de adherentes.
Explicó que para facilidad de los promotores, el propio módulo lleva un
registro de las adherencias válidas acumuladas e incluso pueden transmitir en
el momento que lo deseen la información a la ONPE, la que consolidará
automáticamente el número de adherentes validados.
Castillo agregó que la solución tecnológica permitirá reducir la
cantidad de información incorrecta (firmas mal hechas o falsas) y
facilitará el trabajo a las propias organizaciones políticas ya que podrán
conocer diariamente la cantidad de adhesiones válidas acumuladas, por ubicación
geográfica, género, rango de edades, etc., pudiendo de esta manera planificar
de manera más eficiente su campaña de recolección de firmas.
Así, este modelo permitirá que
se utilice una característica intrínseca y personal de la persona, su huella
dactilar, como medio para la identificación del adherente complementado por su
firma.
El actual proceso de
verificación de firmas de adherentes para la constitución de partidos
políticos, iniciado por la ONPE en el año 2004, cuenta con una norma ISO 9001:2015, y se ha desarrollado con resultados satisfactorios
al no haber recibido ninguna observación de las organizaciones políticas que
presentaron sus lotes de firmas para verificación.
En cifras, el organismo
electoral ha procesado 20 millones de registros y ha verificado 11 millones de
firmas de 69 organizaciones políticas de ámbito nacional sin reclamo alguno.
El proyecto de reglamento de
identificación de adherentes ha incorporado el binomio firma y dactilograma
para dar paso al el uso de registros biométricos en los
procesos de verificación que desarrolle la ONPE.
La verificación de firmas de adherentes para la inscripción de los
partidos políticos la realiza la ONPE por disposición de la Ley de
Organizaciones Políticas. También verifica las firmas de los candidatos al
Consejo Nacional de la Magistratura y las firmas necesarias para la
convocatoria a un referéndum de demarcación e integración de regiones.